Sunday, February 18, 2007

Hair Police & Pengo - Virus Thoughts (Gods of Tundra, 2007)

Como parte de esta nueva serie de lps que Gods of Tundra ha venido poniendo en circulación aparece este fantástico doce pulgadas que testimonia una jam entre dos bandas capitales de la escena norteamericana de hoy en día, Pengo y Hair Police. Extrañamente, la resultante no es lo que podría esperarse de cualquiera de los dos colectivos. En "Virus Thoughts" no hay percusiones ni rítmica alguna, los riffs, arpeos o líneas de bajo brillan por su ausencia.
El álbum está dividido en una serie de intermitentes inundaciones sonoras, donde una caótica marejada de sonidos se aglutina hasta el tope e inesperadamente se deja caer en un profundo e inesperado silencio. Si bien todas estas subidas siguen el mismo patrón, en cada una se alcanza a apreciar cómo sus identidades varían en lo más elemental de sus composiciones. Por momentos incluso samplers alcanzan a distinguirse entre todo el caos. Momentos de feedback, ruido y música se ven entrelazados en un esquema más grande, totalmente inusitado. "Virus Thoughts" es una de esas -tan extrañas- verdaderamente afortunadas colaboraciones en donde priva una homogeneidad que supera los trabajos regulares de las bandas que intervienen.(S.S.)

Hay muy pocas bandas hoy en día que podrían ayudar a definir el noise de una manera más contundente que Prurient, el proyecto solista de Dominick Fernow, quien además maneja la disquera Hospital Records. Para este nuevo lp para Hanson Records, Fernow rescató algunas grabaciones que había realizado en 2001 y que sin duda pueden definir perfectamente la labor de este violento gritante.
"Prurient" está compuesto por mareas de estática, circuitos en colisión y sus quebrantos, feedback altisonante y dolorosos gritos. Apenas por momentos pueden escucharse oscuros loops disparándose para conformar una rítmica pero, fuera de eso, podría decirse que el total del álbum es puro, brutal y gutural ruido.
El lado A está únicamente compuesto por "Superstition/Nymph", un track que inicialmente recuerda los experimentos vocales de Blixa Bargeld, pero llevados al extremo; un ataque brutal que dura apenas unos instantes; luego, voces deformadas por efectos que no parecen poder detenerse, volcanes de gis en plena erupción, sumergiéndolo todo, ceniza volando por doquier entre los oscuros vientos de un negro amanecer.
El lado B está conformado por cuatro tracks. "Smoke/I". Una especie de calentamiento donde los efectos comienzan poco a poco a tomar forma y a encimar sus poderes uno a uno. El total reunido es la conclusión. "Scrap/Me" está llena de chirridos intensos provocados al presionar micrófonos sobre las bocinas y efectos abandonados a su suerte culminan por propagar ese sabor alcalino, ácido de una experiencia tan distante a lo que habitualmente se llama placer. Los gritos de Fernow parecen sacados de la agonía de una cruenta batalla. "Stranger/You" son altisonantes agudos cerrando y abriendo sus órbitas mientras algunos efectos matizan el único momento de relativa -muy relativa- calma en este lado. "Strangehold/Baptism" parece conjurar todos los violentos instantes reunidos en esta cara con todo su estremecedor poder. Al momento que se levanta la aguja del vinil, sólo me queda una intensa sensación de frío y nerviosismo.
No queda mucho que agregar. "Prurient" es muestra del por qué Fernow es considerado uno de los más intensos performers hoy en día. Su actuación el el No Fun Festival del año pasado y sus constantes trabajos son algunos otros claros ejemplos de su brutal talento. Por el momento basta recordar que este álbum se presenta exclusivamente en lp y que de las quinientas copias editadas quedan ya sólo unas pocas. (S.S.)

Saturday, February 03, 2007

Emaciator - Heatstroke (Tapeworm Tapes, TW-19, 2006)

Heatstroke de Emaciator consiste en dos tracks llenos de suciedad y óxido por parte de Jon Borges. Este proyecto alterno a Pedestrian Deposit parece dirigirse a trabajos no tan complejamente estructurados en comparación, que consisten sobre todo en portentosos nudos de distorsión y en la saturación de espacios.
El jam que comprende el primer lado comienza con el gruñido de una máquina que parece motorizada. Vibraciones que imitan aceleraciones se ven aumentadas a distancia por tonos dibujándose en la lejanía, claramente incapaces de competir con las olas de herrumbre acústica. Entonces, de la nada surge una oscilación que sí logra ofrecer un matíz a las corruptas atmósferas. Poco después, todo se centra en la pelea entre ambas partes, que logran entrelazarse y revolotear una junto a la otra. Un par de embates a lo que parecen ser instrumentos de cuerda amplificados por micrófonos de contacto y efectos, acaba por lograr que ese foco se pierda.
Intentando forjar una suerte de ritmo a través de los espirales brotando de sus efectos, Emaciator parece buscar en sus segunda oferta un paraje sonoro donde puedan converger sus vibraciones hechas secuencias con el ruido transformado en constantes pulsos. Tras formalizar esta imagen, parece no quedar mucho espacio adonde ir. Los matices son mínimos y parecen ubicarse mayormente en paulatinos cambios de tono. Arriesgarse podría hacer que todo se cayera en pedacitos, así que Borges prefiere optar por consolidar su cada vez más obliterante actuación. Poco a poco, todo comienza a perfilarse como una órbita que se expande y contrae y que, efectivamente, concluye con el chirrido de una rueda eléctrica imaginaria.
Decididamente no tan portentoso como Pedestrian Deposit, Emaciator ofrece una salida de espontaneidad a su creador. Habrá que estar pendiente a que ofreceran sus nuevas ofertas bajo este mote, ya que una avalancha de títulos se aproxíma -comenzando por su nueva cinta en Run Down Sun. (S.S.)